Olivina

La olivina es un mineral raro, en color verde oliva, que se localiza en zonas volcánicas o rocas ricas en magnesio y hierro. En estado natural tiene la apariencia de un cascote pesado, afilado y rugoso.

Procede de las Islas Canarias, Brasil, Egipto, Irlanda, Rusia e Sri Lanka. Ésta es una de las pocas piedras que tiene un solo color. La intensidad del verde puede cambiar dependiendo de la cantidad de hierro presente en su estructura, desde un matiz amarillento, verde oliva o marrón verdoso. Es una piedra muy apreciada en joyería.

Durante mucho tiempo fue considerada una piedra protectora. Se le atribuyen propiedades para aumentar la energía positiva, depurar las vibraciones negativas, sanar el corazón herido y ayudar al olvido. Así comúnmente la usan en el principio de sus rituales como intento de armonización del ambiente, ayuda en la elevación espiritual, la meditación, la búsqueda del conocimiento y la paz general.

En culturas como la azteca y la egipcia, usaban esta piedra para purificar el cuerpo y fortalecer los ojos en caso de miopía. En color más amarillento se usaba también para casos de dolores de estómago.

Promueve la energía y el bienestar. Se usaba para potenciar la limpieza interior en caso de enfermedad, para promover la regeneración y la salud. También es beneficiosa en caso de estrés sobre todo cuando tiene un color más amarillento que simboliza el poder del Sol.

Se asocia con el dinero y las buenas oportunidades. Incluso se usaba por muchas parteras para facilitar el trabajo de parto, estimular las contracciones y la apertura del canal de parto.